Entradas

Mostrando entradas de febrero, 2021

Chucaque

Imagen
 Cuando tenía 16 años me gustaba visitar a mi amiga Giovanna –a quien tuve el gusto de llevar como pareja de promoción al terminar el colegio –y jugar paleta frente a su casa, una especie de tenis pistero con una línea que simulaba una imaginaria red. Se armaban unos minicampeonatos espectaculares. Un día, estábamos haciendo un triangular con otra amiga, cuando de repente la pelota cae en un techo vecino. Entonces –siendo el único hombre–, decidí de inmediato treparme al techo para alcanzar la pelota. Me ayudaron a subir haciéndome “patita de gallo” (una especie de banco con las manos donde pisar), una vez en el techo devolví la pelota y al observar en panorámico desde arriba, me dio la sensación de que saltar desde esa altura me causaría un irremediable dolor. Para pensar en cómo podría bajar lo más fácil posible, decidí sentarme al borde y observar el partido entre mis amigas. –¡Baja! –me gritó Giovanna. –¡Jueguen!, ¡jueguen! ¡Desde aquí se ve espectacular! –Baja, o ¿no puedes bajar?