El Guía
Esta historia me la contó mi amigo Ivan. Le sucedió a los 6 años el año de 1974.
Su tía cumplía tres meses de fallecida. Junto con su madre y su hermana mayor fueron a ponerle flores al Cementerio El Ángel.
Mientras ellas ponían las flores y oraban frente a la tumba tipo nicho. Ivan como todo niño inquieto corrió hacia el extremo del pabellón para curiosear
- ¡Niño! ¿Estás perdido? - Al voltear encontró un tipo vestido con el uniforme de los empleados del cementerio.
- No, allí están mi hermana y mi mamá.
- ¿Conoces el cementerio? Ven te enseño.
Primero lo llevó a un lugar donde habían nichos sin nombre.
- Esos son los que se portaron mal en su vida.- sorpresivamente las tapas de los nichos no estaban encementadas como es normal y alcanzó a observar que salían gusanos.
- Me da asco.
- Sí, es que se portaron mal.
Luego lo llevó a ver mausoleos que un poco más parecen casas. Llegaron al cementerio antiguo. El Presbítero Maestro.
- Mira niño, aquí puedes encontrar ex presidentes, escritores y muchas personalidades de la historia del Perú.
Llegaron frente a la tumba del expresidente Luis M. Sánchez Cerro.
- Acuérdate bien niño, esta tumba es inspirada en “La Piedad” de Miguel Ángel. En la piedad encuentras a Jesús muerto descansando en los brazos de su amada María. Aquí puedes encontrar a un soldado muerto en brazos de una extraña mujer con casco. Es el soldado muerto en brazos de su amada patria.
Ivan me contaría que en el Vaticano llegó a ver “La Piedad” y recordó esta experiencia.
- Ya es hora de regresar. Tu madre debe estar preocupada.
Al volver encontraron a la madre y hermana junto a un policía y al personal de seguridad del cementerio, quienes vestían igual que su nuevo amigo. Lo buscaban. Ivan se soltó de la mano de su guía.
- ¡Ivan! ¿Dónde te has metido?
- Me fui a conocer el cementerio con él. - señaló hacia donde dejó parado a su guía.
- ¿Con quien?
- Estaba allí.- los de seguridad del cementerio se miraron entre sí. Descubrieron algo.
- Por favor ¿pueden acompañarnos?
Los llevaron a un nicho: era una tumba con una foto de un tipo de lentes.
- ¿Él es quien te paseó niñito?
- Sí, es él, pero no llevaba lentes.
- Es un compañero de trabajo, que falleció hace unos años, no es la primera vez que pasa algo así.
Comentarios
Saludos australes.